Marlon Sandoval iba de copiloto, junto a su esposa, Madeleine Ramos, quien conducía el Chevrolet Spark que fue arrastrado por la furia del arroyo El Salao, en el municipio de Soledad (Atlántico), en la tarde del lunes festivo. Tras el hecho no hay rastro de la mujer de 35 años y a la hija de la pareja, una niña de 5 años.
El sujeto, de 40 años, recordó que iban en el vehículo en medio de una copiosa lluvia, cuando de repente se encontraron de frente con una ola de unos dos metros de alto: era el Salao que venía hacia ellos.
“Mi esposa se asusta y pierde el control del carro. El agua comenzó a llenar el vehículo y ella me dijo que salvara a la niña y me la da, pero en ese momento el carro se movió y comenzamos a tragar agua. Mi hija gritaba Dios mío salva a mi papi y a mi mami”, relató.
Sandoval fue expulsado del vehículo, pero su esposa y la menor fueron arrastradas.
Mientras tanto, los padres de Madeleine quedaron en estado de shock al conocer la noticia de su desaparición, por lo que tuvieron que ser trasladados de urgencia a un centro asistencial.
Según Walbert Valverde, tío de la mujer desaparecida, la familia se dirigía hacia Cartagena, debido al trabajo que desempeña como instrumentadora quirúrgica.
La búsqueda de madre e hija fue suspendida en la noche del lunes y se reanudó en la mañana de este martes, según explicó el comandante operativo de la Policía Metropolitana, Yecid Peña Araque.
El vehículo apareció en la vereda Cabica, tras ser buscado por la Policía.
Moradores del barrio Las Moras IV etapa, en Soledad, relataron que la feroz corriente consiguió que el vehículo ingresara por la obra de drenaje que se encuentra en la prolongación Murillo y siguiera rumbo hacia La Arboleda.
BARRANQUILLA
