La Contraloría General del Estado informó que ya están listos los resultados preliminares de las investigaciones realizadas en torno a la construcción de los hospitales de Bahía y Pedernales, y la ampliación de las casas asistenciales de Manta y Portoviejo.

En junio pasado fue detenido el exasambleísta por Alianza País, Daniel Mendoza, por el presunto delito de delincuencia organizada, relacionado con la estructura de corrupción en la construcción, entre otros, del hospital básico de Pedernales. Por el mismo caso fue aprehendido Edmundo Tamayo, director del Servicio de Contratación de Obras (Secob).

El informe preliminar de Contraloría determinó que funcionarios de Secob favorecieron al Consorcio Pedernales Manabí, pese a no cumplir con la experiencia general ni específica requerida para el contrato. Además, la empresa brindó información incorrecta sobre una subcontratista.

El nuevo hospital de Bahía de Caráquez, de donde Mendoza es oriundo, también está inmerso en supuestos actos de corrupción. Recientemente el exlegislador aseguró que las coimas por ese contrato se usaron para su movimiento político, Mejor. Las indagaciones revelaron que se habría contratado con un diseño definitivo que no cumplió con las diferentes etapas de los proyectos, en un sitio que no garantizó el adecuado funcionamiento del proyecto y que no contaba con un estudio de impacto ni licencia ambiental. Los trabajos de fiscalización fueron adjudicados a una empresa de la familia de Franklin Calderón, también vinculado en el caso Mendoza.

Adicionalmente, según la investigación de Contraloría, se detectaron irregularidades en los contratos para la reconstrucción y remodelación del hospital de Manta y la terminación de tres áreas del nosocomio de Portoviejo.