Los restos de la sargento chilena en retiro que fue asesinada en Santander y cuyo cuerpo fue incinerado y esparcido en el municipio de Rionegro llegaron en la medionoche del sábado a Santiago de Chile, en medio de un sentido homenaje que adelantaron los carabineros del país austral.

El féretro de esta extranjera que, según las pesquisas de Medicina Legal, habría perdido la vida el pasado 29 de marzo en Bucaramanga fue escoltado por uniformados y conducido a una funeraria de la capital chilena, donde está siendo velada en estos momento.

Familiares le dijeron a EL TIEMPO que la eucaristía para despedir a Ilse Ojeda se tiene prevista realizar en horas de la mañana del domingo, en un templo de la localidad de Providencia, y su entierro se realizará en el Cementerio Metropolitano, al mediodía.

La muerte de Ilse Amory Ojeda se ha convertido en uno de los casos de feminicidio más sonados de Santander en los últimos años, sobre todo, por la crueldad de su homicidio, cuyo presunto autor es Juan Valderrama, su pareja sentimiental.

Él se encuentra recluido en la cárcel Palogordo, de Girón, y podría enfrentar una pena de más de 60 años de prisión por los delitos de feminicidio agravado, desaparición y alteración del material probatorio.

CÚCUTA