La condición de la mujer rural destacó en el programa de conferencias de UTEG

La situación de la mujer rural en Latinoamérica y Ecuador, su rol y aporte a las sociedades Latinoamericanas y la visión de la academia frente a su situación social y económica fueron los puntos que se expusieron ayer, lunes 13 de septiembre, en el programa de conferencias digitales que ofrece la Universidad Tecnológica y Empresarial de Guayaquil (UTEG).

En Ecuador, las condiciones de vida de las mujeres rurales se evidencian en cifras alarmantes. Según el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC), de los 2 millones que conforman la población femenina en el campo solo el 21% puede ser cubierto por el Instituto Ecuatoriano de Seguro Social (IESS).

El 53% de mujeres rurales generan el principal ingreso de sus familias, pero el 39% de ellas trabajan sin recibir ningún pago. Mientras que la disparidad de género en relación al trabajo realizado afecta más a las mujeres porque trabajan 83 horas frente a las 60 horas de trabajo de los hombres semanalmente.

Estos datos fueron revisados por la Dra. Mara Cabanilla, rectora de la UTEG, quien destacó la importancia de este espacio de disertación para hacer conciencia sobre el programa de mujeres rulares que los ponentes invitados compartieron con los asistentes.

La conferencia estuvo a cargo de la Dra. Claudia Brito, experta en Género y Sistemas Sociales e Institucionales, representante regional de la FAO (Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación) y del Econ. Agustín Zimmermann, analista e investigador de economías emergentes y perspectivas económicas mundiales, representante de FAO Ecuador.

“Como academia hemos venido trabajando en temas de investigación desde que nos conocimos con Claudia y comenzamos a desarrollar líneas de investigación sobre género en empresas familiares y ahora la hemos abierto mucho más”, comentó la rectora.

Sus palabras dieron paso al anunció de la próxima apertura de la Maestría en Género y Desarrollo, la cual considera que será un aporte vital para crear políticas públicas requeridas para fomentar programas sociales de apoyo a estas invisibilizadas mujeres y sus familias.

“Creo que estamos en la obligación de formar a profesionales que tendrán la capacidad de armar y organizar estas políticas que tanto se requieren cuando trabajen en los distintos gobiernos u organizaciones donde puedan finalmente implementarlas”, sostuvo la Dra. Cabanilla.

Los ponentes son representantes de FAO, la Organización de las Naciones Unidas que vela por la eliminación del hambre bajo una igualdad entre hombres y mujeres.

La conferencia sobre la mujer rural estuvo a cargo de la Dra. Claudia Brito y el Econ. Agustín Zimmermann, representantes de la FAO; y contó con la participación de la Dra. Mara Cabanilla, rectora de la UTEG.

Por su parte, la Dra. Brito presentó la visión regional de la mujer rural, además de algunas soluciones y entradas transformadoras en el contexto de la pandemia.

De acuerdo a sus cifras, en América Latina 58 millones de mujeres juegan un rol central en la producción y abastecimiento de alimentos, sobre todo en el contexto de pandemia.

“Nosotros sabemos que ellas no han parado en el campo y han contribuido en una labor de respuesta frente a la demanda de alimento, no solo en ciudades sino también en sus comunidades y muy importante, dentro de sus familias”, comentó.

La propuesta de la FAO ha sido buscar soluciones para visibilizar el rol de esas mujeres junto con la colaboración de 25 organizaciones de diferentes sectores para ponerlo como centro de las políticas públicas en Latinoamérica.

“Ellas viven formas de discriminación que no viven los varones en América Latina, por ejemplo, el tema del cuidado, la violencia y el acceso a recursos son temas que siguen dejando a la mujer en una situación de vulnerabilidad”, indicó la ponente.

Entre las acciones clave que mencionó están las de invertir en sistemas de atención ligadas a la política para que ellas tengan participación, también en asegurarles su alimentación y programas de protección social que incluyan no solo un enfoque de género sino intercultural.

Otra acción señalada fue la valorización del trabajo doméstico y la corresponsabilidad familiar, porque dijo que el Estado debe reconocer que las mujeres no deben ser vistas como las cuidadoras, también deben estar en el plano de ser cuidadas al igual que el hombre, los ancianos y los niños.

Brito comentó que la ayuda de la academia es de vital importancia desde la investigación para que se involucre en entender mejor esa dinámica de desarrollo sostenible, de cómo se alimentan los pueblos de la región y cómo desaparecer las brechas que siguen en ese espacio.

Finalmente indicó que la academia debe cumplir su rol de veedor social en relación con las decisiones que se están tomando a nivel de Estado, así como también sugirió la creación de investigación de centros de género para promover este tema.

Respecto a la situación de estas mujeres en Ecuador, Agustín Zimmermann dice que es muy parecida a la de otras mujeres en América Latina.

“Ecuador es un país en que el desafío y los indicadores de inseguridad alimentaria son uno de los más altos de la región y de América Latina. Muchas veces las tasas de crecimiento de la economía ecuatoriana no han permitido reducir los índices de nutrición y este es el desafío que como representación para Ecuador tenemos por avanzar”, explicó el analista económico.

El contexto ecuatoriano señala que el 49,40% de la población rural en el Ecuador son mujeres; el 61% de las mujeres del área rural se dedican a actividades de agro producción; solo el 23,90% son jefas de hogar, el 36% son propietarias de tierras y el 20,2% no tienen ningún nivel de educación frente al 11,7% de los hombres.

A decir de Zimmerman, FAO impulsa el Programa Mundial de Alimentos, ONU Mujeres y el Fondo Internacional de Desarrollo Agrícola, todos con el mismo interés común de trabajar en el proceso de construcción de políticas públicas para abordar las cuestiones de desigualdad de género en el medio rural, en colaboración con el Ministerio de Agricultura y Ganadería.

“La FAO también está empujando a nivel nacional la Construcción de un Plan Agropecuario que abordará los principales desafíos e instrumentos para la agricultura del Ecuador en el período de 2020 – 2030”, anunció el investigador.

Para llegar a un diagnóstico de la situación de estas mujeres rurales se llevaron a cabo 18 talleres en 4 regiones del país, en los cuales se recogieron testimonios y experiencias de 1.300 participantes.

“Ecuador es un ejemplo tristemente de lo que pasa a nivel regional con el tema de desigualdad de género en el medio rural”, comentó el experto.

Existe un programa de la Unión Europea que ha elegido a Ecuador como país piloto para promover un enfoque trasformador de género. “Aquí se abordarán las capacidades institucionales y locales para incorporar este enfoque, tendrá un componente a nivel institucional, también a nivel de campo”, expresó el representante de FAO Ecuador.

La UTEG ofrece todos los lunes, a las 17:30, charlas con expertos nacionales e internacionales, como parte de sus eventos de desarrollo académico y actualización de conocimientos en el campo empresarial, tecnológico y comunicacional.

Para quienes deseen asistir a estas conferencias gratuitas, favor registrarse en el sitio web de la UTEG www.uteg.edu.ec.