‘Pócima para duplicar dinero’ sería causa de crimen de universitarios

En la mañana de este martes se cumple la audiencia de imputación de cargos contra Joan Severiche Beltrán y Arley de Jesús Riquet Baldovino, capturados por una patrulla de la Policía el domingo en la mañana luego de que se percataran cuando los jóvenes lanzaban a un arroyo los cuerpos de Luis Carlos Narváez Narváez, de 38 años, y Leonel Andrés Cadena Rodríguez, de 28 años.

La audiencia se cumple en la sala 11 del centro de servicios judiciales, localizada en el centro de Barranquilla, donde en estos momentos se agolpan periodistas, familiares y amigos de los jóvenes para conocer los avances del caso.

La Fiscalía revelará en la audiencia detalles sobre los hechos que desencadenaron este doble crimen.

La noche anterior, el juez Séptimo Penal Municipal de Barranquilla legalizó el procedimiento de captura de Severiche y Baldovino, quienes hasta el momento son los dos únicos detenidos por el execrable hecho.

La principal hipótesis en la investigación, dijo la Fiscalía, tiene que ver con que las víctimas habrían negociado con Arley de Jesús la garantía de un proceso químico con el cual, supuestamente, se podía «duplicar los billetes» de 50.000 pesos; es decir, falsificarlos.

Así las cosas, Riquett Baldovino le habría entregado un dinero Narváez Narváez y a Cárdenas Rodríguez,

Asesinos

Los dos capturados fueron identificados como Arley de Jesús Riquett Baldovino, de 23 años, de edad, y Joan Severiche Beltrán, de 26.

Foto:

Policía Nacional

Molestos, Arley de Jesús, quien es estudiantes de Ciencias Sociales en la Universidad del Atlántico, y Joan Severiche buscaron a las víctimas en la noche del pasado sábado y se dirigieron al barrio San José, donde residen los capturados.

Las víctimas fueron heridas con armas blancas en varias ocasiones.

Al parecer les habrían propinado más cortes durante el recorrido dentro del vehículo, pues las víctimas fueron retenidas por los dos jóvenes.

Después de asesinarlos, los capturados salieron en dos carros y se llevaron los cuerpos a la vía Las Flores-La Playa, a primera hora de ese domingo. La patrulla de la Policía habría evidenciado el momento cuando los jóvenes lanzaban a un arroyo los cadáveres.

La defensa de los implicados trata de desvirtuar los señalamientos que hasta el momento ha presentado la Fiscalía, asegurando que no hubo flagrancia, ya que no se acababa de cometer el delito.

Entre los argumentos de la defensa de los jóvenes se manifiesta que las manchas encontrada en la ropa de los detenidos no puede ser identificada como sangre humana, hasta que un estudió así lo certifique, por lo que pidieron que sus clientes fueran dejados en libertad.

BARRANQUILLA