¿Qué posibilidades hay de que ocurra otro terremoto fuerte en Armenia?

Por Laura Sepúlveda

Especial para EL TIEMPO- Armenia, Quindío.

Investigaciones de varios expertos señalan que hay altas probabilidades de que se vuelva a repetir un sismo como el de hace 20 años.

Como lo hizo meses antes del terremoto de 1999, el geólogo y miembro de la Academia Colombiana de Ciencias, Armando Espinosa Baquero viene advirtiendo por estos días sobre la recurrencia de los sismos en la región. Su propósito no es generar pánico, como piensan algunos, sino que la comunidad esté prevenida, que tenga sus propios planes de contingencia y que investigue sobre el terreno donde adquiere sus planes de vivienda.

Según el geólogo, que en los últimos años ha realizado estudios detallados del sistema de fallas que atraviesan el Quindío y sus alrededores, “hay un patrón de sismicidad en la región y no lo podemos olvidar”.

Advirtió que hay dudas sobre algunos terrenos de la capital quindiana en los que se construyó pese a que la ciudad aún no tiene el estudio de microzonificación sísmica que debe actualizarse desde hace años, pues el primero de este tipo se elaboró en el 2000 y se logró gracias a recursos donados por organizaciones internacionales.

Edificio de la carrera 15. 1999/2019.

Siguen existiendo dudas sobre los llenos (como en el barrio La Brasilia, que quedó destruido) que fueron los terrenos más afectados con el sismo pero ahora se han ocupado zonas nuevas y no sabemos cómo se van a comportar ante un sismo”.

Hugo Monsalve, docente e investigador de la facultad de ingeniería de la Universidad del Quindío, la actualización no se ha realizado porque la Administración manifestó no contar con los recursos necesarios para la implementación de las normas actuales de construcción con sismorresistencia.

“Armenia tiene que cumplir, porque muchas edificaciones no han tenido en cuenta estos detalles actualizados de la microzonificación, pero ya la Gobernación del Quindío señaló que se haría cargo”, explicó Monsalve.

El acuerdo al que se llegó a través de la Gobernación consiste en aplicar recursos por regalías para que en Armenia se pueda actualizar el POT con las normas de microzonificación y también realizar estudios de zonificación indicativa en los restantes 11 municipios del departamento.

«Armenia tiene que cumplir, porque muchas edificaciones no han tenido en cuenta estos detalles actualizados de la microzonificación».

Asamblea departamental del Quindío. 1999/2019.

¿Puede ocurrir un nuevo terremoto?

Hace dos décadas, Espinosa adelantó un estudio histórico que tuvo en cuenta datos históricos e informes hallados en la prensa de la época. “Vimos que cada 20 o 25 años habían ocurrido con bastante regularidad, en (23 de noviembre) de 1979 y antes fue en (30 de julio) de 1962 y antes en (4 de febrero) 1938, en todo el siglo XX hubo una frecuencia de más o menos 20 años. En daños estos sismos fueron muy parecidos al de 1999. Se conocen bien esos sismos, lo que pasa es que la gente los olvida”.

En Armenia, muchos recuerdan que precisamente, antes del terremoto, escucharon acerca de estas investigaciones pero no prestaron atención. “Tres meses antes salió una nota en el diario local, y de hecho ese tema lo publicaron al menos dos veces en 1998, porque yo dicté una charla en la Sociedad de Ingenieros del Quindío y de ahí tomaron la información. Se ha tratado de mantener un poco informada a la gente sin que se asuste pero a veces se crea pánico, y no es lo que se busca”.

Desde hace años, el director del Observatorio Sismológico de la Universidad del Quindío, el ingeniero Hugo Monsalve, también viene informando sobre las probabilidades de un nuevo sismo, al igual que lo hizo en 1998. Sus afirmaciones no son pronósticos, ni vaticinios sino el resultado de un análisis de probabilidades de ocurrencia de eventos, como el que realizó antes del sismo de 1999.

Iglesia del Sagrado Corazón. 1999/2019.

Monsalve y su grupo de investigación adscrito a la universidad, de hecho tienen un estudio llamado ‘Potencial sísmico de la zona de subducción en el Quindío y Risaralda’ que referencia los sismos de los últimos 42 años.

El ingeniero explicó que, por ejemplo, se tomó una ventana de tiempo entre el 2005 y 2015, “Estos sismos de subducción (más profundos) son los que estamos esperando que se puedan llegar a presentar en la región”.

Monsalve enfatizó que es una observación de probabilidad, “no es una certeza, ni estamos poniendo una fecha, quién diga el día y la hora de un sismo está mintiendo y son especulaciones. Lo que nosotros hacemos con este tipo de trabajos es advertir a la población para que esté preparada para estos eventos”.