El exagente de Policía del Servicio de Inteligencia de Ecuador, Raúl Chicaiza, afirmó que recibió presiones para involucrar el expresidente Rafael Correa en el secuestro del político Fernando Balda en 2012; pero aseguró que todo lo que dijo en su testimonio anticipado es verdad.

Desde Argentina, país donde se encuentra refugiado, Chicaiza ofreció una rueda de prensa virtual para asegurar que vinculó a Correa porque lo amenazaron con no aplicarle los beneficios de Cooperación Eficaz con la Justicia y sentenciarlo a nueve años de prisión si no declaraba que el exmandatario instigó la operación.

La acusación de Chicaiza hizo que la jueza Daniela Camacho impute al exmandatario por supuesto intento de secuestro y emitió una alerta roja para la Interpol.

Chicaiza culpó al expresidente del Consejo de Participación Ciudadana y Control Social, Julio César Trujillo -ya fallecido- como el autor de las amenazas. Además, señaló directamente al presidente Lenín Moreno de urdir el caso en complicidad con el propio Fernando Balda.

El exagente sostuvo que la Secretaría Nacional de Inteligencia, en ese entonces dirigida por Pablo Romero (hoy en prisión), nunca cometió el delito de secuestro contra Balda. “Lo que hicimos fue labores de inteligencia para evitar que este pseudoactivista, que en realidad estaba involucrado en la venta de equipos de espionaje desde Colombia a Ecuador, hiciera daño al país”, expresó.

Pese a sus afirmaciones Chicaiza no mostró pruebas y dijo que este era “un primer guión” y que próximamente presentaría documentos, audios, videos y otros elementos para sustentar lo expuesto.

Durante la videoconferencia, el expolicía manifestó que no puede asegurar que Correa es inocente “porque no soy ni juez ni parte”.

“Del 100% del testimonio anticipado el 95% es real, nadie lo está negando, y el 5 % es una presión política donde si no metíamos o no hacíamos lo que decía el presidente del CPCCS no se nos otorgaba la cooperación eficaz”, afirmó.

El exagente añadió que solicitó refugio al gobierno argentino y al momento espera el documento que le acredite como tal.

Durante el juicio del caso Balda en el 2018, la Fiscalía presentó 20 testigos y documentos que señalaron que Chicaiza y la exagente Diana Falcón participaron en el secuestro por orden de Pablo Romero y la aprobación del expresidente Correa, quien en su defensa argumenta que es un perseguido político.