Cerca de 250 vehículos fueron recibidos con aplausos y emociones por quienes los vieron pasar a lo largo de nueve kilómetros de recorrido en la fiesta caleña.

Los carros que conservan hasta el aroma original, los rejuvenecidos y algunos repotenciados levantaron aplausos y silbidos para sus sonrientes viajeros, vestidos con pelucas, gafas y ropa de siglos pasados.

En medio de ese desfile de vehículos cargados de historias y memoria, los bicicleteros pusieron el paso en una caravana bajo los 30 grados de las 3:30 de la tarde en Cali.

El desfile de los Autos Clásicos y Antiguos tuvo así más de una sorpresa y un destello entre quienes aprecian los modelos y el brillo de las láminas.

Los vestidos floreados, las minifaldas, los pantalones bota campana, los tocados, las diademas, las balacas, las calzonarias, las corbatas y las gorras eran detalles de conductores y pasajeros.

La autopista Sur volvió a ser el escenario para este programa que se convirtió en una tradición de la Feria de Cali.

Este año, el desfile se extendió por nueve kilómetros con la presencia de unos 250 autos matriculados, la mayoría, entre 1920 y 1970. A la cita acudieron coleccionistas desde ciudades como Popayán, Bogotá y del Eje Cafetero.

Los asistentes pudieron verlos entre la carrera 39 y la carrera 70, para seguir luego por la avenida Pasoancho con carrera 82, entre Alkosto y La 14.

La Orquesta La Misma Gente, con sus éxitos Juanita AE y Titico, puso sus notas en el recorrido por la historia sobre ruedas.

El Ejército, la Fuerza Aérea Colombiana, la Policía y la Armada hicieron presencia y recibieron sus aplausos a su paso, entre uniformados y vehículos de guerra.

El desfile tiene fines sociales por los recursos recaudados por publicidad se destinan a proyectos solidarios como la atención de los adultos mayores del Ancianato San Miguel.